Perdonad la longitud de este vídeo, la cantidad de muerte asciende hasta cotas vertiginosas y desbordantes. Por una parte me paseo por el primer laberinto pthumerio hasta encontrarme con sendos jefes; por otra no encuentro a la Sombra de Yharnam de muy buen humor y me parte la cara unas cuantas veces intentando ganarme el paso a la escuela de Byrgenwerth.
Las respuestas tendrán que esperar, si es que llegan alguna vez en Bloodborne...